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Cuando el futuro nos alcance

Si no hacemos nada, los pronósticos para el año 2030 serán poco favorables para el clima y para la seguridad alimentaria de México y el mundo. MasAgro, programa de la SADER y el CIMMYT, ofrece soluciones innovadoras para poner fin al hambre.

Por: Divulgación-CIMMYT
12 de noviembre de 2019

Texcoco, Edo. Méx.- ¿Qué pasaría si el lugar donde vivimos se volviera un desierto o quedara cubierto por el mar? El cambio climático está haciendo que estos escenarios dejen de ser ficción. Todas las sociedades, familiarizadas o no con el término, resienten sus efectos: lluvias torrenciales o fuera de ciclo, sequías prolongadas, calores más intensos y —en general—estaciones del año que ya no se distinguen unas de otras.

De acuerdo con el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), los efectos del aumento de la temperatura global se intensificarán en los siguientes años, de manera que si no se actúa urgentemente, en el año 2030 la seguridad alimentaria mundial y la habitabilidad misma del planeta estarán en un punto crítico y −probablemente− no habrá retorno.

¿Cómo la variabilidad climática pone en riesgo la disponibilidad de alimentos? El incremento de la temperatura global disminuye los rendimientos de los cultivos y afecta particularmente la producción agrícola de temporal. En México 79% de la superficie cultivada es de temporal y, al igual que en otros países en desarrollo, alrededor de 80% de los alimentos es producido bajo este sistema que depende del agua de lluvia.

El cambio climático afecta entonces a los sectores más vulnerables. Actualmente, 75% de las personas en situación de pobreza en el mundo viven en zonas rurales y dependen de la agricultura para sobrevivir (50% de las personas con hambre son de familias de productores). En nuestro país, cerca de 27 millones de mexicanos —23.3% de la población— se encuentra en situación de pobreza alimentaria y 80.8% de los hogares rurales presentan algún nivel de inseguridad alimentaria.

Ante este panorama, se requiere la acción conjunta e inmediata de los Gobiernos y las sociedades del mundo. Para alinear esfuerzos, la ONU ha establecido 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que buscan mejorar el escenario hacia el año 2030. Además, reconoce y promueve la implementación de estrategias exitosas e innovadoras que contribuyan al logro de estos objetivos globales y que puedan ser replicadas en diversos territorios rurales y a múltiples escalas.

MasAgro —programa de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) y el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT)— es una de las estrategias que han sido reconocidas por fomentar el desarrollo rural sostenible, la alimentación saludable, la erradicación de la pobreza y la resiliencia ambiental.

¿Cómo MasAgro contribuye a poner fin al hambre y lograr la seguridad alimentaria? MasAgro es reconocido por incrementar los rendimientos y la productividad de maíz, trigo y cultivos asociados en México a través de prácticas sustentables (como la Agricultura de Conservación). Sin embargo, son su metodología y su enfoque —centrados en el productor— los que han hecho de este programa una herramienta eficaz para reducir la inseguridad alimentaria de las comunidades.

Entre sus resultados más recientes, por ejemplo, destaca el establecimiento de nueve plataformas poscosecha a lo largo del país. Estas son espacios donde se implementan y difunden tecnologías herméticas para el almacenamiento y la conservación de granos, particularmente dirigidas a la agricultura familiar de autoconsumo.

Las plataformas poscosecha adquieren relevancia cuando se considera que con la pérdida de la biodiversidad por el cambio climático se acentúa la incidencia de diversas plagas (pues se pierde el equilibrio que mantenían sus depredadores naturales), incluyendo las de almacén, las cuales pueden ocasionar pérdidas hasta de 40% de la cosecha.

Con soluciones poscosecha, el incremento de los rendimientos y la obtención de granos más sanos y nutritivos, MasAgro constituye un programa clave para que México logre erradicar el hambre y la inseguridad alimentaria y —adicionalmente— avance en su camino hacia el cumplimiento de los ODS de la ONU.

 

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