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Reducir la importación de trigo harinero es posible

Por: Divulgación-CIMMYT
22 de julio de 2014

22 de julio de 2014.


El ganador del Premio Mundial de Alimentación 2014 argumentó que México podría reducir las importaciones de trigo harinero hasta en un 30 por ciento con el uso de semillas mejoradas, que permitan aumenta el rendimiento promedio nacional.

Importar la mitad del trigo que se consume en el país es necesario, ya que el consumo nacional asciende a los 8 millones de toneladas, teniendo en cuenta que actualmente la producción media nacional oscila entre 3.5 y 4 millones de toneladas de trigo.

En México existen regiones con potencial para aumentar su productividad como lo son Puebla, Tlaxcala y el Estado de México, con la adaptación y uso de nuevas variedades resistentes a plagas y enfermedades, permitiendo el buen desarrollo del cultivo. Hay que destacar que la superficie cultivada en nuestro país no tiene el potencial para lograr la autosuficiencia, pero en definitiva si se pueden reducir las importaciones si se logra el aumento en rendimientos.

Sanjaya Rajaram, precisó que en estos estados del centro del país, hoy se obtienen dos toneladas por hectárea, pero bien se puede duplicar la producción en áreas de temporal. Por otro lado, destacó el experto, en el Valle del Carrizo, Sinaloa, existen posibilidades de reconvertir 50 mil hectáreas de maíz a trigo tolerante a sequía.

Respecto a porque nuestro país no ha logrado cambiar su cultivo de trigo duro o cristalino, para pastas, por trigo harinero que demanda la industria galletera y panificadora, el investigador comentó que hace falta facilidad de adaptación, capacitación y un programa de semillas, ya que el agricultor tarda tres o cuatro años para tener una variedad, pero el problema no es el costo de ésta, sino el acceso a estas semillas.

También sugirió incentivar el cultivo de trigo harinero con un subsidio, ya que el trigo duro tiene un poco más de rendimiento y es por eso que el agricultor prefiere cultivarlo, aunque el precio de mercado de ambas variedades es el mismo.

Refirió que este año la SAGARPA dio un subsidio de 400 pesos por tonelada al harinero, pero esto se decidió a destiempo y no había semilla.

Por otro lado, de las 51 variedades de trigo que el investigador ha desarrollado, en México se aplican unas 10, pero se van intercalando de acuerdo a como se presentan las plagas y enfermedades, las cuales pueden impactar entre 20 y 30 por ciento de la producción cuando no se actúa a tiempo.

Sanjaya Rajaram confió en que en 10 ó 15 años el rendimiento promedio de trigo mexicano se elevará a 7.5 toneladas por hectárea, pero tenemos que hablar con agricultores y brindarles asesoría técnica.

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