Oaxaca.- Mediante el proyecto ‘Fortalecimiento del Acceso a Mercado para Pequeños Productores de Maíz y Leguminosas en Oaxaca, Chiapas y Campeche’ —impulsado por Walmart Foundation y el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT)— durante 2020 se han impartido diversos talleres para fomentar la asociatividad entre productores de diversas regiones de Oaxaca.
El propósito de estos talleres no solo ha sido facilitar el acceso de los pequeños productores a los mercados (mediante su asociación en grupos formales o informales, pero debidamente organizados), sino también preservar y fortalecer sus formas de organización tradicionales (como el tequio o la mano vuelta), su cultura y su tejido social. Además, en muchos casos estos talleres son el complemento de otros esfuerzos en el marco del proyecto, como es el fomento de la diversificación de cultivos.
En la localidad Cienéga de Zimatlán, en la región de los Valles Centrales de Oaxaca, por ejemplo, se establecieron parcelas con asociación de cultivos alternativos (canola, grass pea, avena y alfalfa) para darle opciones de forrajes a los productores de la localidad. Es importante mencionar que además del buen rendimiento de forraje que se ha obtenido, se ha documentado la presencia de gran número de insectos benéficos, particularmente polinizadores.
En esa misma localidad, un par de meses después, se impartió el curso “Promoción de la asociatividad y acceso al financiamiento”, junto con la Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero (FND). El curso permitió revisar experiencias pasadas de asociatividad y mejorar diversos aspectos, incluyendo temas como la confianza entre los productores.
Acciones similares para impulsar la diversificación de cultivos y el acceso a mercados para darle salida comercial a los excedentes se realizaron en San Matías Chilazoa, localidad del municipio Ejutla de Crespo, Oaxaca. Allí, se organizó incluso una sesión plenaria para revisar el caso de la organización local UCIRI, logrando acuerdos internos de gran importancia para los productores y fomentando los valores tradicionales de la comunidad.
Diversificar cultivos en una parcela no solo tiene propósitos agronómicos (mejorar el suelo) o socioeconómicos (facilitar el acceso a mercados), sino también permite consolidar la organización entre productores y, sobre todo, fortalecer el tejido social de las comunidades. Esto es un ejemplo de una #AgriculturaParaLaPaz.