La Mixteca Alta busca frenar la degradación del suelo
Mediante un taller derivado del proyecto CLCA —que impulsa el CIMMYT en Oaxaca—, productores, funcionarios, académicos, estudiantes y miembros de organizaciones no gubernamentales de la Mixteca Alta identificaron aspectos clave en los sistemas agrícola-ganaderos para contribuir a frenar la degradación de los suelos.
Por: María Boa y Lennart Woltering, investigadores del CIMMYT.
Febrero de 2020.
Por: Divulgación-CIMMYT
27 de abril de 2020
Yanhuitlán, Oax.- El característico relieve de la Mixteca Alta, en Oaxaca —donde abundan montañas desnudas, dunas y paisajes yermos— es testigo de una larga historia de severa erosión y degradación del suelo. La deforestación, las prácticas agrícolas no sustentables y el sobrepastoreo son algunos de los factores que históricamente han contribuido a esa situación.
Si bien han surgido diversas iniciativas para mitigar los efectos de la erosión en la Mixteca Alta, la agricultura sigue siendo uno de los sectores clave para hacer frente a esta problemática. En el campo es necesario que existan acciones adecuadas al contexto y sostenibles en el tiempo (en la región se tienen experiencias de proyectos que no han sido sustentables), involucrando a todos los actores relacionados con el sector agroalimentario.
Para construir soluciones sustentables y duraderas junto con las comunidades de la región, recientemente el equipo del proyecto CLCA (Uso de la Agricultura de Conservación en sistemas agropecuarios en zonas áridas para mejorar la eficiencia en el uso de agua, la fertilidad del suelo y la productividad en países del norte de África y Latinoamérica) organizó un taller para comprender, a partir de la perspectiva de los productores y los actores clave de estos sistemas, cuáles son los desafíos (así como sus causas y posibles soluciones) y las oportunidades para ese sector.
El taller —realizado en las instalaciones del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP)— forma parte de las actividades iniciales del proyecto CLCA en Oaxaca, que se enfoca en mejorar los medios de vida de los pequeños productores agropecuarios en la Mixteca Alta, región donde predomina la agricultura de temporal, aunque existen productores con sistemas de riego, como en el valle de Nochixtlán.
La apertura del taller estuvo a cargo de Sofía Castro —titular de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Pesca y Acuacultura (SEDAPA) de ese estado—, y se contó con la participación de alrededor de 60 asistentes, entre personas de diversas asociaciones agropecuarias y organismos no gubernamentales, técnicos, funcionarios locales, productores y académicos y estudiantes del Centro de Bachillerato Tecnológico Agropecuario (CBTA) de Santo Domingo Yanhuitlán. La asistencia de estos últimos es un hecho particularmente relevante, porque entre los efectos del deterioro de los sistemas agroalimentarios en la región está la migración de los jóvenes, además del empobrecimiento de la población y la inseguridad alimentaria.
El taller se realizó a partir de un análisis rápido del Panorama de Escalamiento (Scaling Scan), una herramienta metodológica de evaluación de escalabilidad que —además de una solución tecnológica— considera aspectos no tecnológicos, como las finanzas y la gobernanza, necesarios para hacer escalable una solución. A través de este, los participantes identificaron como principales retos de los sistemas agropecuarios a la degradación del suelo y la escasez de agua; expresaron que es necesario fortalecer los procesos de adopción de prácticas y tecnologías sustentables; e identificaron oportunidades como el aprovechamiento del estiércol del ganado como fertilizante, así como la socialización y vinculación de iniciativas teórico-prácticas.
Estos hallazgos apuntan a que los principios de Agricultura de Conservación podrían ser una pieza clave para transformar positivamente el panorama agroalimentario en la Mixteca Alta. La identificación de factores que pueden limitar o potenciar el impacto a escala de cualquier solución es útil para aprender de las experiencias locales pasadas y actuales y para fortalecer los lazos de colaboración entre los diferentes actores.
Para el proyecto CLCA —el cual es financiado por el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) e impulsado por el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) y diversos colaboradores nacionales e internacionales—, este tipo de espacios son una oportunidad para crear y fortalecer alianzas, así como para aprender y actuar de forma colaborativa a fin de construir sistemas agroalimentarios más sustentables y productivos.